Probablemente cada vez que te encuentras con un título como este, aparecen aspectos un tanto motivacionales diciéndote cosas como “ve tras tus sueños”, “deja de trabajar para otros”, “se libre”, “hazte millonario con tus ideas”, etc.
Aquí comparto un poco sobre mi propia experiencia y algunos factores que pueden aumentar la probabilidad de éxito de tu nuevo negocio. Quizás también te resulte útil esta información para contestarte algunos de los miles de interrogantes que puedas tener sobre cómo dar ese paso de empleado a empresario de la manera menos riesgosa posible. Pues si tu situación es similar a la que yo viví, quizás ya estés por encima de los 30 años, tienes un nivel de ingresos aceptable (del que no estás satisfecho), un bonito auto y un apartamento (que probablemente aún estás pagando) y tienes que pagar las cuentas que sustentan el nivel de vida y ciertos gustos que te das y que obviamente no quieres perder.
Creo que el mío es el caso “típico”. Aunque comencé a crear y vender productos desde antes de graduarme como ingeniero, me dejé seducir por las facilidades que ofrece ser empleado unos meses después de salir de la universidad. Fue así como dediqué más o menos 9 años de mi vida a trabajar, principalmente en temas de gestión de calidad, al final de los cuales era una especie de ejecutivo de una “buena empresa”, “bien pagado”, que usaba ropa bonita e iba a reuniones con otros ejecutivos a restaurantes caros.
Y fue precisamente mi habilidad para solucionar problemas en esta empresa y poner en marcha proyectos que le generaron grandes ingresos económicos, lo que ayudó a despertar de nuevo en mí el propósito de crear mi propia empresa, que traía desde cuando estaba en la universidad.
¿Cómo llegué a renunciar e ir tras mis sueños? La verdad, me tomó cerca de dos años ejecutar esa decisión. Pero hoy, después de casi tres años de haberlo hecho, de haber desarrollado y vendido diferentes productos informáticos para los profesionales de la salud, de haber experimentado gran cantidad de altibajos económicos y anímicos, y haber tenido la oportunidad de entrenar a cientos de emprendedores siendo parte del equipo de Startup Essentials y Apremy, recomiendo lo siguiente para quienes estén pensando en dar el paso:
- Fortalece tu red social y profesional, la vas a necesitar sobre todo si piensas emprender alrededor de problemáticas en el sector en el que te desempeñas.
- Si tienes una idea: habla sin temor y sin recelo sobre ella. Aprovecha que tienes acceso a personas que pueden darte buena retroalimentación (o que probablemente serán tus clientes) y sobre todo ESCUCHA.
- Si no tienes una idea: concéntrate en conocer en detalle un problema que identifiques y que te interese resolver. Pasa tiempo con quienes experimentan el problema, entiende por qué es un problema, y sobre todo, evidencia si pueden y les interesa pagar por una solución a ese problema.
- Invierte tiempo y dinero en entrenarte. Puedes ser administrador de empresas o ingeniero industrial y tener años de experiencia, pero me permito advertir es muy diferente manejar una empresa que viene marchando desde hace años a crear una empresa desde cero. Sobre todo si traes en mente crear una empresa de alto potencial de crecimiento.
- Consigue un mentor experto en creación de negocios. Háblale con honestidad, nadie va a robar tu idea, engañar a tu mentor es como engañar a tu médico.
- Evita renunciar a tu empleo por lo menos hasta que encuentres el encaje de tu producto en el mercado (Product Market Fit), es decir, hasta que tengas clientes y ventas. Idealmente serán tus nuevos jefes, es decir tus clientes, quienes te digan cuándo te necesitan de tiempo completo.
Espero que este artículo te haya resultado útil e interesante. Si estás pensando en “dar el paso” te invito a unirte a nuestro programa Consulta a Apremy, a través del cual podrás recibir asesoría sobre tu idea de negocio GRATIS y aumentar tus probabilidades de éxito. Recuerda que 9 de cada 10 nuevos emprendimientos fracasan.
